Cabezas de ciervo decomisadas. |
Le seguían la pista desde el pasado mes de septiembre, pero no fue hasta el pasado día 1 cuando agentes del Seprona confirmaron la existencia de un taller ilegal y clandestino de taxidermia en La Carolina, tra identificar un todoterreno Toyota-Land Cruiser, propiedad de un vecino de Guarromán, que trasportaba 11 ciervo de diferentes tamaños, que fueron decomisadas por los agentes de la Guardia Civil.
El Seprona de Linares seguía una pista clara: varios actos de furtivismo en fincas de caza mayor en los términos de Santa Elena y Vilches sujetos que, según sospechaban los agentes, llevaban posteriormente sus "trofeos de caza" a un taxidermista de La Carolina.
El Seprona de Linares seguía una pista clara: varios actos de furtivismo en fincas de caza mayor en los términos de Santa Elena y Vilches sujetos que, según sospechaban los agentes, llevaban posteriormente sus "trofeos de caza" a un taxidermista de La Carolina.
Gracias a diversas averiguaciones se confirmó la existencia de ese taxidermista en La Carolina que, presuntamente, se dedicaba a la "naturalización de las piezas de caza y trofeos en una calle de La Carolina". Ese era el dato seguro, sin más detalle sobre el número o lugar exacto, por lo que la vigilancia era el único arma que les quedaba, lo que llevó a los agentes el pasado día 1 hasta el todoterreno Toyota citado anteriormente y a la posterior identificación del conductor en el preciso momento en el que introducía varias cabezas de ciervo en una casa de la referida calle.
Los agentes procedieron a preguntar al supuesto taxidermista el motivo de recoger aquellos animales muertos, a lo que, según detalla el periódico Ideal, el hombre aseguró ser "aficionado a la taxidermia" y confesó tener un pequeño taller en su vivienda. La Patrulla del Seprona pudo comprobar, entonces, que en la casa había otras cinco cabezas de ciervo, dos cabezas muflón y dos jabalíes pequeños naturalizados.
Por tanto, y como el sujeto "carece de autorización para dedicarse a la actividad de taxidermia", se decomisaron las especies naturalizadas y fueron depositadas en dependencias Oficiales de la Patrulla actuante. Además, ambas personas fueron denunciadas por supuesta infracción a la Ley 8/2003 de 28 de Octubre de Flora y Fauna Silvestre, denuncia que se ha remitido al Delegado Provincial de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, a cuya disposición quedaron las piezas intervenidas.
Los agentes procedieron a preguntar al supuesto taxidermista el motivo de recoger aquellos animales muertos, a lo que, según detalla el periódico Ideal, el hombre aseguró ser "aficionado a la taxidermia" y confesó tener un pequeño taller en su vivienda. La Patrulla del Seprona pudo comprobar, entonces, que en la casa había otras cinco cabezas de ciervo, dos cabezas muflón y dos jabalíes pequeños naturalizados.
Por tanto, y como el sujeto "carece de autorización para dedicarse a la actividad de taxidermia", se decomisaron las especies naturalizadas y fueron depositadas en dependencias Oficiales de la Patrulla actuante. Además, ambas personas fueron denunciadas por supuesta infracción a la Ley 8/2003 de 28 de Octubre de Flora y Fauna Silvestre, denuncia que se ha remitido al Delegado Provincial de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, a cuya disposición quedaron las piezas intervenidas.
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